Más sobre Rosa de Jericó
La Rosa de Jericó (Selaginella Lepidopilifera), es un helecho del desierto originario de Oriente Medio y América Central. El nombre 'rosa' es confuso porque la planta no produce flores coloridas, sino que parece un helecho redondo con hojas similares a las de las coníferas.
Esta planta en particular puede crecer y reproducirse durante largos períodos de tiempo en áreas desérticas como una planta normal, hasta que su entorno ya no pueda garantizar su supervivencia. Cuando las flores y las hojas están muertas y caídas, y la planta ha perdido toda su humedad, las ramas secas se enrollan hacia adentro y forman una bola redonda. Las raíces se retiran del suelo y la planta se deja llevar por el viento del desierto hasta que un día encuentra un lugar húmedo donde puede seguir creciendo. La bola se despliega, se esparce y arroja sus semillas, que germinan. Una vez que se riegan las plantas jóvenes, brotarán rápidamente en los brotes. Incluso después de muchos años sin agua, la planta puede volver a la vida. Por eso a menudo se le llama "planta de resurrección".
Efectos:
La rosa de Jericó se vende en México como diurético. También se utiliza en rituales vudú y santería cubana para generar amor, felicidad y dinero. Se dice que la planta absorbe energía negativa cuando la transporta el cuerpo.
Instrucciones de uso:
Una rosa de Jericó completamente deshidratada se enrosca y se vuelve gris y quebradiza, pero cuando se coloca en agua volverá a crecer. Las hojas se despliegan, el color verde natural vuelve y el helecho vuelve a ser un organismo vivo. Coloque la rosa en un platillo o tazón durante 3 días o más hasta que esté completamente verde y abierta. A menudo es necesario cambiar el agua. Deje que la planta se seque por completo después de estar verde y viva durante una semana.