¿Son los psicodélicos literalmente las puertas para nuestro ser interior?
Aquí viene un pensamiento interesante: ¿Qué pasa si lo que vemos durante un viaje no es solo algo 'inventado' por nuestro cerebro sino objetos reales 'concretos'? ¿Qué pasa si al tomar alucinógenos estamos literalmente abriendo las puertas a un mundo generalmente no percibido? ¿Un mundo dentro de nosotros mismos? Resulta que eso podría ser lo que sucede cuando las personas toman psicodélicos. La idea de que sustancias como la psilocibina, la mescalina o la ergina abren las puertas a nuestros mundos internos podría significar más de lo que inicialmente se pensaba.
Por lo general, tendemos a describir los efectos de las drogas psicodélicas con palabras como 'alucinaciones', 'distorsión de la realidad' o experiencias 'oníricas', insinuando la percepción de lo que no existe, de lo que carece en nuestro sobrio y 'concreto' mundo. Pero 'alucinación' puede no ser el único término para describir experiencias psicodélicas. Mucho de lo que percibimos como 'alucinaciones' podría describirse más bien como 'fosfenos' o 'visión entóptica', asociada a la percepción de objetos 'concretos', como células y vasos sanguíneos, dentro de nuestros propios ojos.
Resulta que, cuando se dan las circunstancias correctas, nuestros ojos son capaces de observar las cosas que se encuentran dentro de ellos. Entre la córnea, la parte más externa de nuestro ojo, y la retina, donde la luz que ingresa a nuestros ojos se detecta y se convierte en señales neuronales; hay un mar de diferentes nervios y células que nuestro cerebro puede detectar. Por lo general, nuestro cerebro logra filtrar lo que no es relevante para nuestra percepción cotidiana. A veces, sin embargo, esto no sucede. Cuando la luz brilla en cierto ángulo, o cuando una determinada sustancia o estímulo excita algunas de nuestras células, puede ocurrir un fosfeno o un fenoma entóptico; revelándonos los componentes internos de nuestros ojos.
Visión entóptica y fosfenos vs fotografía de fluorescencia
La investigación realizada durante los años 70 y 90 ha confirmado que algo de lo que se ve durante un fenómeno de visión entóptica o de fosfeno, también se puede observar mediante la fotografía de fluorescencia. Más que eso, se ha argumentado que las imágenes entópticas pueden tener una resolución aún mayor que la de la fotografía de fluorescencia. Durante el siglo 19 Purkyne, un anatomista y fisiólogo Checo, hizo anotaciones de sus observaciones entópticas de forma muy detallada. Al iluminar sus ojos con un rayo de luz afilado, logró observar y hacer un dibujo muy detallado de todo el sistema de vasos circulatorios de la retina. Estas observaciones se han llamado desde entonces de árbol de Purkyne.
Fosfenos y entópticos: una breve historia
Los chamanes en ciertas partes del mundo han estado haciendo uso de estos fenómenos durante muchos años para diagnosticar una variedad de infecciones tropicales diferentes. Como señala un antropólogo llamado César E. Giraldo Herrera, los agentes causales de algunas infecciones tropicales comunes como Leishmania spp, Trypanosoma spp, Plasmodium spp y Toxoplasma spp pueden encontrarse, en cierta medida, dentro de los vasos sanguíneos presentes en los ojos. Lo que los chamanes han aprendido es que pueden identificar estos agentes a través de fenómenos como los de los fosfenos y la visión entóptica. Después de muchos años de práctica, los chamanes han reunido el conocimiento para diagnosticar y prevenir estas enfermedades utilizando únicamente sus cuerpos y las plantas y materiales disponibles en su entorno.
En Europa, la comprensión de lo que serían los 'fosfenos' y la 'visión entóptica' solo vinierona aparecer alrededor del siglo 18, cuando varios estudios comenzaron a describir el fenómeno. A lo largo del siglo18 y hasta principios del siglo 20, estas descripciones eran relativamente prolífica. Sin embargo, con el advenimiento de las nuevas tecnologías microscópicas, el interés en estos fenómenos comenzó a disminuir hasta llegar a un punto en el que se había convertido en un efecto curioso que ya no era relevante para la ciencia moderna.
Sin embargo, en los años 80, la importancia de estos fenómenos comenzó a ganar importancia nuevamente. Por ejemplo, se demostró que un tipo de fosfeno llamado "efecto de campo azul" es un método particularmente bueno y económico para evaluar el estado del sistema inmunitario, así como el flujo sanguíneo y la velocidad. Del mismo modo, la visión entóptica también demostró ser una técnica económica en el control diagnóstico de la diabetes y otras enfermedades que pueden afectar la retina, como las infecciones sistémicas que algunos chamanes están preparados para diagnosticar.
Fosfenos y visión entóptica: lo que aún se puede aprender / enseñar
En las comunidades donde las prácticas chamánicas aún son comunes, se siguió desarrollando el conocimiento sobre las prácticas que involucran fosfenos y visión entóptica. Como tal, estas comunidades hoy en día tienen un inmenso conocimiento del cual las prácticas 'occidentales' todavía tienen mucho de qué aprender. Parte de su conocimiento se puede observar en los rituales que tienden a acompañar el diagnóstico de ciertas enfermedades. A diferencia de los investigadores occidentales entre el siglo 18 y 20, que tendían a centrarse en el papel de la luz como un disparador para fosfenos y la visión entóptica; los chamanes también han reunido muchos conocimientos sobre el papel de diferentes sustancias como desencadenantes de tales fenómenos. Al combinar la luz y los productos químicos entre otras formas de estimulación, los chamanes probablemente pueden hacer observaciones aún más detalladas de lo que hay dentro de los ojos.
Pero, ¿qué son exactamente los fosfenos y la visión entóptica? Bueno, ambos tienen algo que ver con la luz dentro del ojo. Mientras que uno tiene que ver con la emisión de luz, el otro tiene que ver con la absorción de luz. Los fosfenos aparecen cuando las células dentro de nuestro ojo emiten luz, la visión entóptica ocurre cuando parte de la luz que ingresa a nuestro ojo produce una sombra.
Fosfenos: explicación ampliada
Incluso si no está acostumbrado a tomar psicodélicos, probablemente haya experimentado fosfenos en algún momento de su vida. Los fosfenos pueden aparecer no solo como resultado de un viaje psicodélico, sino también cada vez que aplicas algo de presión a tus ojos. En condiciones de laboratorio, también se ha demostrado que también pueden activarse mediante estimulación eléctrica y magnética. Hay muchos tipos diferentes de fosfenos, pero en general pueden reconocerse por el patrón de luz que forman, como los que se muestran en la imagen a continuación.
(imágenes de: https://figshare.com/articles/_Illustrations_of_basic_phosphene_patterns_and_their_transformation_to_8220_cortical_coordinates_8221_/399632/1)
En la década de 1950, Max Knoll realizó múltiples estudios con fosfenos. A partir de estos estudios, desarrolló una lista que contiene 15 tipos diferentes de fosfeno, clasificados según su forma. Para los estudios que realizó, los fosfenos se indujeron pinchando áreas de la corteza visual con un electrodo.
La naturaleza exacta de los fosfenos sigue siendo un tema de debate, pero actualmente la teoría principal es que se originan en las células dentro de nuestros ojos. Como todo en el mundo, las células están formadas por átomos, y estos átomos emiten y absorben constantemente luz (fotones). Por lo general, el cerebro reconoce e ignora la luz emitida por nuestras células oculares, pero a veces eso no sucede. Cuando el cerebro no puede "entender" que la luz que se percibe proviene de nuestro propio ojo es cuando aparecen los fosfenos. Estos fosfenos pueden adoptar una variedad de colores diferentes, cada color asociado con una molécula fuente diferente.
Visión entóptica: explicación ampliada
A diferencia de los fosfenos, la visión entóptica se origina cuando la luz que ingresa a nuestros ojos es bloqueada por los cuerpos que se encuentran entre la córnea y la retina. A medida que los nervios y las células que se encuentran entre la córnea y la retina bloquean la entrada de algunos de los fotones en el ojo, se forma una sombra. Esta sombra es lo que luego detecta nuestro cerebro como una visión entóptica. Las sombras que se perciben son literalmente las sombras de los nervios y las células que han absorbido la luz que entra en los ojos. ¡Se sugiere que incluso las criaturas tan pequeñas como las bacterias y los protozoarios se pueden observar con visión entópica! La foto de abajo es una buena ilustración de una imagen entóptica.
(imágenes de: https://commons.wikimedia.org/wiki/Category:Floaters#/media/File:Floaters.jpg)
Viajes psicodélicos y nuestra luz interior
Durante un viaje psicodélico, los químicos responsables de su viaje también podrían ser responsables de la sobre estimulación de algunas de las células dentro de sus ojos. Lo que esto significa es que, de repente, tus ojos emitirán más luz de lo habitual, lo que aumenta la probabilidad de que veas un fosfeno. La inducción de fosfenos, por otro lado, también podría conducir a una mayor probabilidad de observar fenómenos entópticos. Al igual que la visión entóptica se puede obtener al hacer brillar un rayo de luz en los ojos, la luz creada por sus propias células también puede desencadenar la formación de imágenes entópticas.
Entonces, la próxima vez que ingrese a un viaje psicodélico, vigile los diferentes patrones y formas que ve: algunos de ellos podrían ser, literalmente, los componentes de su visión. Viajar, como parece, se trata de ver lo más profundo de nuestra psique y nuestro cuerpo.
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